Todo quedará resuelto en la noche del 26 de mayo, dentro de apenas 19 días. Tras 10 meses de esfuerzos y tensiones, de alegrías y sinsabores, de más de medio centenar de encuentros oficiales desde Buñol hasta el Parque de los Príncipes, llegan las tres semanas decisivas para lograr el objetivo y hacer valer todo el trabajo desde el pasado agosto. La Real llega a este tramo decisivo, cuando sólo quedan 12 puntos en litigio, en una posición de privilegio, con ventaja con respecto a sus perseguidores para cumplir con su propósito inicial: hacer historia con la consecución de la quinta participación consecutiva en Europa por primera vez. Esto está casi logrado; ahora queda el gran reto de mantener la sexta plaza en sangrante pelea con el eterno rival en estas lides: el inefable Betis.
Puede ser matemático el lunes
En cuanto a la cercanía de volver a ser europeos de manera matemática, de asegurar, mínimo el séptimo puesto que da el pasaporte para la Conference League, dos apuntes. La Real podría sellarlo matemáticamente este próximo lunes si le gana al Barcelona en Montjuïc y si el Valencia pierde la víspera en casa ante el Rayo. No se antoja fácil. Más factible es que suceda el siguiente jueves, día 16. Con ganar al Valencia, la Real ya habrá obtenido su pasaporte europeo pase lo que pase en el resto de partidos del cuadro ché y del Villarreal, que están a siete y nueve puntos. En ambos casos, la Real tendría el goal-average particular ganado.
Muchos puntos para aguantar
Por otra parte, es difícil predecir qué necesita la Real para sujetar esa sexta plaza con el marcaje en corto (sólo dos puntos de ventaja) al que le está sometiendo el Betis. Parece claro que será determinante el duelo que librarán ambos equipos en la antepenúltima jornada en el Benito Villamarín el domingo 19 (horario por determinar).
Lo normal es que pudiera valerle el empate en Sevilla si logra ganar los dos partidos de casa, ante el Valencia y el Atlético. Obligaría a los de Pellegrini a vencer en los tres restantes (Almería en casa y Las Palmas y Madrid fuera). Real y Betis empataron (0-0) en la primera vuelta en Anoeta y, en el caso de otra igualada en Sevilla y de que ambas escuadras terminaran la Liga con los mismos puntos, los guipuzcoanos acabarían por delante ya que su balance de goles (+13) es muy superior al bético (+4).
La Real puede tener un calendario sobre el papel más complicado y es previsible que pueda haber ‘sorpasso’ en la próxima jornada, en la que los de Imanol visitan al Barcelona en Montjuïc y el Betis recibe al descendido Almería. Pero los de Imanol acometen este ‘rush’ final en buena racha y motivados por los precedentes de los últimos cuatro años, en los que siempre lograron el objetivo al final.
Los mejores desde marzo
Desde que fue eliminada de la Champions por el PSG, la Real es el equipo que más puntos ha sacado de entre sus rivales directos para las plazas continentales. En este tramo de siete partidos, los txuri urdin han obtenido una cosecha de 14 puntos, por 12 el Villarreal, 11 el Athletic y 10 el Betis y el Valencia.
Con respecto a los precedentes, a la Real le bastaría con sumar los nueve puntos de los últimos 12 que sumó la campaña pasada y en la 2020/21, pero, para ser sexta, quizá no le alcanzaría con los 6 puntos de la 2021/22 o los cinco de la 2019/20.
A evitar una previa de riesgo de Conference
El objetivo claro de la Real es conservar su sexta plaza actual para jugar la Europa League y no caer a la séptima, que es europea, pero que conlleva disputar una ronda previa de Conference League no exenta de peligro. Se celebra el 22 y el 29 de agosto, con la Liga ya empezada, y el enemigo a batir sería un equipo de una entidad inferior a la de una Real, que, por el coeficiente UEFA acumulado estos años, sería cabeza de serie. No le podría tocar el Brujas como a Osasuna ni, en ningún caso, un rival alemán -Friburgo y Hoffenheim son los candidatos-, ni italiano -Lazio o Nápoles quizá-, ni inglés -Newcastle, United...-, ni francés -ahora Lens-.
