HE PROBADO LOS CMF BUDS DE NOTHING: SU DISEñO TAN ORIGINAL NO ES LO úNICO QUE ME HA ENCANTADO DE ESTOS AURICULARES

Nothing continúa adentrándose en el segmento del audio con su submarca CMF, que comenzó sus andaduras en septiembre del año pasado.

Esta se diferencia de Nothing en que sus productos son más asequibles, aunque en consecuencia también algo más humildes. A principios de este año, Business Insider España pudo analizar los CMF Buds Pro.

Ahora, he podido probar los CMF Buds, una versión algo más modesta –aunque muy cercana en su precio– y que cuenta con un diseño bastante diferente a su hermano mayor.

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Este es mi análisis en profundidad de los CMF Buds tras usarlos como mis auriculares para todo.

Los CMF Buds tienen un diseño único que no había visto casi nunca.

Si en algo destacan estos auriculares de CMF es en su diseño casi único, con un acabado con toques premium, al menos en apariencia, y con un estuche de carga cuadrado con bordes redondeados, algo que no suele verse en el mercado, con diseños más ovalados.

 

De cualquier forma, los CMF Buds recuerdan a otros dispositivos de Nothing, que siempre apuesta por un diseño algo más industrial.

Aunque el color blanco que he probado se ensucia con mayor facilidad que otras opciones disponibles, esto no empaña su diseño general; ahora bien, al cerrar la tapa del estuche de carga, a veces tendrás la impresión de que los vas a romper, ya que el material no parece muy resistente.

Por otra parte, cuenta con detalles en su diseño, como los logos de la marca, a los que se unen el puerto de carga, el botón de conexión rápida y 2 agujeros para que puedas unir los auriculares a un llavero o donde prefieras llevarlo.

En este sentido, sus medidas –54,7 x 54,7 x 23 milímetros– no se hacen molestas al transportarlo en el bolsillo; es más, suponen una ventaja respecto a otros diseños que optan por un acabado circular u ovalado.

En cuanto a la comodidad al llevarlos puestos en la oreja, se adaptan perfectamente a la oreja y no me han resultado incómodos, aunque ya depende de cada persona; en cualquier caso, llegan con diferentes tallas de almohadillas, algo muy positivo.

Escuchar música con los CMF Buds es una delicia y en las llamadas el viento no es problema.

Entre los auriculares de su gama, los CMF Buds me han resultado muy notables para escuchar música durante el día. Llegan con un ancho de banda audible de 2.900 Hz, lo que significa que hay suficientes detalles en su audio como para ofrecer buena calidad.

En este sentido, creo que son unos auriculares que no distorsionan en gran medida el sonido al máximo volumen y que, además, el nivel más alto es realmente elevado, provocando que no escuches absolutamente nada del exterior.

A ello se suma que permite la cancelación activa de ruido (ANC), ajustable desde la app de la que te hablaré a continuación, y también cuenta con 2 agujeros en la parte inferior de cada auricular, con el objetivo de reducir las interferencias del viento.

Durante el tiempo que los he probado, como puedes apreciar por mi pelo en las fotografías, ha hecho muchísimo viento, con lo cual este es uno de los apartados a los que más he podido sacar partido. En resumen: es uno de las cualidades que más me han gustado de los CMF Buds.

Adicionalmente, la reducción del ruido ambiental que permite su diseño, con 4 micrófonos HD, se combina con un algoritmo que mejora la claridad durante las llamadas, así como las voces de los interlocutores.

Finalmente, también he de destacar sus bajos en casi cualquier género musical. Estos cuentan con tecnología Ultra Bass 2.0 y se ajusta en tiempo real con hasta 5 niveles.

Se conectan fácilmente, aunque con algunos dispositivos viejos me ha resultado imposible.

En cuanto a su apartado de conectividad, los CMF Buds llegan con bluetooth 5.3, así que no deberías tener problemas para conectarlos a cualquier dispositivo.

No obstante, con algunos móviles con versiones anteriores de bluetooth, me ha resultado imposible conectarlos, mientras que en otros terminales más avanzados como ordenadores, televisiones o móviles recientes la conexión ha sido inmediata.

Para complementar a estos auriculares, la compañía ha optado por usar la misma aplicación que ya tiene para sus productos principales, Nothing X, disponible en la Play Store de Google, desde donde la he instalado en mi caso.

Como ves, desde esta puedes configurar muchos valores, como los diferentes modos de sonido, en el que destaca Dirac Opteo –una solución ya optimizada–, la elección del nivel de los bajos o el control del ruido, entre otras cosas.

El único punto negativo que he encontrado es que el modo de baja latencia disponible para videojuegos no se activa automáticamente en ningún dispositivo, a menos que tengas un móvil de Nothing.

Sea como sea, Nothing X es una aplicación muy completa y fácil de usar, con la que podrás aprovechar aún más los CMF Buds.

Los CMF Buds me han permitido escuchar música durante una jornada de 8 horas.

Uno de los mejores apartados de los CMF Buds es, sin duda alguna, su batería.

Cada auricular cuenta con 45 mAh, una cifra que se reduce ligeramente respecto a la versión Pro de estos. En cualquier caso, sigue siendo un valor muy positivo, ya que podrás aguantar una jornada de 8 horas sin que se agote la batería.

Este valor, no obstante, es el que he conseguido usándolos para escuchar música; si accedes a llamadas o tienes la cancelación de ruido activada, la duración desciende hasta aproximadamente 6 horas.

Por su parte, el estuche de carga cuenta con 460 mAh, exactamente el mismo en este caso que en la versión Pro de los CMF Buds. Según lo que he podido comprobar, te servirá para cargar los auriculares durante más de 2 días, unas 30 horas más o menos.

Los CMF Buds son perfectos si buscas diseño original, buena reducción del ruido y autonomía para aguantar 8 horas de sobra.

Tras probar los CMF Buds, creo que el apartado que más me ha llamado la atención ha sido el de su diseño: optar por una forma de cuadrada para su estuche de carga hace que resulte más fácil su transporte en el bolsillo, en comparación con los esféricos u ovalados.

Más allá de eso, creo que para su rango de precios, en los 39 euros a la fecha de este artículo en la tienda de CMF de Nothing en Amazon, son unos auriculares que se defienden muy bien durante las llamadas, incluso en situaciones en las que el viento es excesivo.

A su vez, llegan con otros apartados muy positivos que me llevarían a comprarlos, como los diferentes modos de audio que permite y su aplicación, Nothing X, fácil de usar y muy completa.

Finalmente, según lo que señala Amazon en la página de compra de los CMF Buds –a la fecha de este artículo–, los CMF Buds tienen un envío estimado de entre 3 y 7 meses.

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